Hello! Otro jueves discutiendo temas de software.

Aunque pueda parecer un poco controvertida, la discusión de hoy es crucial para el éxito en nuestro campo:

La importancia de adoptar una mentalidad de "primero producto" frente a la de "primero el código".

No se si se entienda a que me refiero, pero te explico.

Para iniciar, hagamos un pequeño ejercicio de imaginación.

Piensa en tu aplicación favorita, esa sin la cual no puedes vivir.

Ahora, intenta recordar qué es lo que realmente te encanta de ella. Seguro que tu respuesta gira en torno a cómo soluciona un problema específico o cómo hace tu vida más fácil o entretenida, y no cuán elegante es su código fuente, ¿cierto?

Esa es la esencia de la mentalidad de producto primero:

Crear soluciones que realmente atiendan las necesidades y problemas de los usuarios.

La organización y/o prácticas del código, aunque es importante para nosotros los desarrolladores, pasa a un segundo plano frente a la funcionalidad y la experiencia de usuario.

¿Por qué primero el producto?

Recuerdo que una vez me en una entrevista me hicieron esta pregunta, porque si, hay desarrolladores que están segados por la tecnología que utilizan o por si el código debe llevar 2 tabs o 4 espacios.

No seas uno de ellos. En cambio ten esto en cuenta:

• Soluciones que marcan la diferencia: En un mundo saturado de aplicaciones y software, lo que realmente destaca son las soluciones que resuelven problemas de manera eficiente.
• Usuarios satisfechos: Al final del día, lo que busca un usuario es que el producto funcione bien y cumpla con sus expectativas.
• Flexibilidad y adaptabilidad: Centrarse en el producto permite adaptarse mejor a los cambios y necesidades emergentes de los usuarios.

Ahora, no me malinterpretes.

El código limpio y bien estructurado es algo que compartimos y que tiene un valor incuestionable. Sin embargo, cuando este amor nos lleva a perder de vista el propósito final del producto, es ahí donde entramos en un terreno peligroso.

• Perfeccionismo que retrasa: Obsesionarse con la perfección del código puede llevar a retrasos innecesarios en la entrega del producto.
• Soluciones complicadas: A veces, en nuestro afán por implementar la última tecnología o patrón de diseño, podemos terminar complicando soluciones que deberían ser simples.

El Equilibrio entre producto y buenas prácticas

Entonces, ¿cómo equilibrar el código limpio con la necesidad de entregar productos que realmente solucionen problemas? Aquí van algunos consejos:

• Enfócate en el usuario final: Antes de sumergirte en cómo implementar una solución, pregunta primero si esto es algo que realmente necesita tu usuario.
• Itera y mejora: Lanza rápidamente una versión mínimamente viable de tu producto y mejórala en base al feedback de los clientes.
• Colaboración multidisciplinaria: Trabaja de cerca con el equipo de diseño, marketing y cualquier otro departamento relevante para asegurar que todos persiguen el mismo objetivo: un producto exitoso.

Para finalizar

Adoptar una mentalidad de producto primero no significa abandonar el impulso por el código bien escrito.

Significa entender que nuestro amor por la tecnología sirve a un propósito mayor: crear productos que mejoren la vida de las personas.

Así que la próxima vez que te enfrentes a tu editor de código, recuerda preguntarte: ¿Esto realmente soluciona un problema? ¿Esto realmente hace la vida de alguien un poco mejor? Si la respuesta es sí, entonces vas por buen camino.

Nos vemos en la edición #25

Y tú, ¿qué opinas? ¿Has experimentado la diferencia entre enfocarte en el producto versus en el código? Comparte tus experiencias y consejos en los comentarios.

Recuerda que si quieres hablar de algo en particular puedes sugerir el tema respondiendo este correo.

Hasta pronto 👊🏼